Los talleres de construcción del cajón flamenco tienen como uno de sus objetivos el integrar a las personas hacia la luthería, haciéndoles comprender que con esfuerzo y trabajo pueden construir cualquier instrumento de percusión con diferentes técnicas de forma clásica, informal, con material reciclado,…

Últimamente proliferan en España los talleres para construir un cajón flamenco. Si buscamos en Internet podemos ver este tipo de cursos, algunos de ellos están a cargo del luthier argentino Nicolás Rodriguez Guerra, especializado en la construcción de instrumentos de cuerda y percusión.

Nicolás Rodríguez Guerra, nace en el año 1983 en Chascomús, provincia de Buenos Aires.-Argentina. Actualmente reside en la ciudad de Olesa de Montserrat, en Barcelona, donde trabaja en su taller siguiendo la tradición de construcción española de instrumentos musicales, hechos en su totalidad a mano, con maderas seleccionadas.

Páginas web de Nicolás. https://nrgluthier.webnode.com.ar/

https://www.guitarradesmontable.com/

En los talleres cada participante crea su propio Cajón Flamenco con madera contrachapada de Abedul y aprende a manejar diferentes herramientas y máquinas de los talleres de carpintería para su realización.

De esta forma los participantes del taller, aprenden y comprenden todas las características técnicas que encierra la construcción de este particular y versátil instrumento de percusión, así como vivir la experiencia de llegar a tocar un instrumento musical construido por ellos mismos.

VIDEO 45 s. Cajón por Bulerias Jordan Migues.

La madera más utilizada para los cajones flamencos es tablero contrachapado de abedul fenólico. Según muchos maestros flamencos el cajón se asemeja a los pies de un bailaor porque está el sonido de la planta (sonido grave) y el de tacón (sonido agudo).

En las fotografías, los carteles de los talleres que Nicolás Rodríguez Guerra ha desarrollado en Madrid, Zaragoza, Valencia o Barcelona. Mediante un método sencillo, se construye un cajón de excelente terminación, calidad, sonido y volumen, en una jornada de cinco horas.